Estas ayudas, dirigidas a empresas privadas y particulares (entre otros), tienen el objetivo de fomentar la diversificación económica de las zonas rurales. Mediante inversiones y acciones dirigidas a la reactivación económica y la creación de empleo; al establecimiento de políticas específicas para los jóvenes del mundo rural; a la promoción de acciones dirigidas a la mitigación y adaptación al cambio climático y la protección de los recursos naturales; y a la estimulación de la innovación y la transferencia de conocimientos en el sector agroalimentario.